Estrella Azahara, ONG de La Salle, participa en una campaña solidaria
La campaña pretende concienciar a los cordobeses de la labor que durante todo el año realiza la ONG Estrella Azahara con los niños de Las Palmeras (Córdoba).
El objetivo fundamental de la pulsera Paparruchas no es recaudar fondos, sino cambiar la conciencia de la sociedad. Así lo explica Juan Antonio Lozano, de la agencia de publicidad Soko, que por segundo año consecutivo lanza esta iniciativa que busca extender a todo el año el espíritu de la Navidad. Con esta obra social se pretende trasladar el mensaje de que la Navidad no es sólo consumismo, regalos o comilonas, sino que estas fiestas se sustentan en unos valores que son necesarios de forma permanente.
“Cada año buscamos un lugar donde todo el año se vivan los valores de la Navidad”, señala, y así el año pasado se escogió el programa de personas sin hogar de Cáritas y este ocasión ha sido Estrella Azahara, la ONG del colegio La Salle que trabaja con los niños de la barriada de Las Palmeras. Los alumnos de este centro docente son quienes en estas fechas se dedican a la venta de la pulsera Paparruchas y, a la vez, a trasladar el mensaje de la labor que se realiza en esta ONG.
Como explica Lozano, “un elemento clave de la campaña es la pulsera, que va un flyer, porque a quien se la vende no se le vende una pulsera sino que se le está contando la historia de la obra social; es decir, se le está concienciando”.
Junto a esta concienciación, este año se han marcado el reto de alcanzar, al menos, los 2.400 euros de recaudación. El porqué de esta cifra es porque es la cantidad solicitada a la Diputación para una subvención, que le ha sido denegada, para llevar a los niños de Las Palmeras a un campamento de Navidad. Desde Soko resaltan la buena acogida de la campaña del pasado año, en la que se recaudaron unos 3.600 euros, y logró que la pulsera la lucieran desde el obispo, Demetrio Fernández, al chef Estrella Michelin Marcos Morán, pasando por el cantante Manuel Lombo, entre otros muchos.
El nombre de la pulsera proviene, lógicamente, de la calificación que el personaje Mister Scrooge del Cuento de Navidad de Charles Dickens utiliza para tildar todo lo navideño. Por esto, desde Soko se ha invertido el valor de la palabra para que ahora sea algo positivo, como la labor social que realiza cada año el colectivo al que se dedica la campaña.
Noticia de La Voz de Córdoba